Johannishof Stumm

Reseña de un crítico de hotel

En mi reciente escapada a Johannishof, disfruté de una experiencia acogedora y encantadora en medio de las impresionantes montañas de Zillertal. Las habitaciones, recién renovadas y con balcones que ofrecen vistas espectaculares, se convirtieron en el refugio perfecto tras un día de esquí. La atención del personal fue excepcional, siempre amable y dispuesto a hacer que nuestra estancia fuera inolvidable, y el desayuno contundente, con una variedad de productos como panes, embutidos y frutas, nos preparó maravillosamente para las pistas. Además, la sauna privada fue un verdadero lujo, permitiéndonos relajarnos después de nuestras aventuras diarias sin las multitudes de un spa público. Sin duda, la ubicación tranquila y la posibilidad de explorar todo el valle en coche hacen de Johannishof una joya escondida que recomiendo a quienes buscan una combinación de calma y maravillosas actividades al aire libre. ¡Volveré pronto!